- PUBLICADO EL: 23/02/2023
- AUTOR: Camilo Duarte, Activista del PCO y columnista del diario Causa Operaria. Licenciado en Física por la UFPB.
Luego de las últimas posiciones de Lula, principalmente en materia de política internacional, la prensa capitalista y sectores de izquierda iniciaron un ataque masivo contra el gobierno. Como en otras ocasiones, la presión proviene tanto de la derecha como de la izquierda, principalmente a través de sectores vinculados al imperialismo.
A visita a Biden
La primera visita de Lula a la administración Biden resultó en una declaración conjunta el 10 de febrero. Es importante resaltar el carácter proforma de la declaratoria, no hubo consecuencias objetivas de la misma salvo una donación previamente anunciada al fondo Amazonía.
En esta visita no hubo concesiones entre las partes, tanto el imperialismo como Lula mantuvieron sus posiciones. A lo sumo, los frutos de la visita fueron una pequeña campaña a favor de Biden como demócrata y de Lula como comprometido con la conciliación.
En público se tocaron temas básicamente diplomáticos. Estos incluyen la presidencia brasileña del G20 y la celebración del bicentenario de las relaciones diplomáticas Brasil-Estados Unidos de América (EE. UU.) en 2024.
El comunicado conjunto estaba vacío, cercano a un discurso contra el hambre mundial de miss mundo. No había nada nuevo en ninguno de los dos lados.
Caso Ucrania
La posición de Lula en el caso de Ucrania sigue una posición tradicional de la burguesía brasileña, de no tomar partido en los conflictos internacionales. Especialmente cuando estos van en contra de los intereses económicos nacionales.
“Hay una apertura de negociación de la posición de Brasil para que Lula sea un articulador de posiciones equilibradas en busca de la paz. Pero no ha habido, digamos, una recepción completa por parte de Biden de esa posición. No veo que Biden quiera ver a Lula como comandante [de la tarea de terminar el conflicto]. Por el contrario, quiere que Lula anteponga los intereses estadounidenses a esa posición. Por eso esta paz no es una posición favorable para Biden ′′ Guilherme Carvalhido.
En este caso particular, una posición a favor de la paz es una posición prorrusa. El conflicto no es exactamente entre Rusia y Ucrania, sino entre Rusia y el imperialismo.
En caso de paz, o sin intervención externa, Rusia resolvería rápidamente el conflicto. Ponendo fin a ese enclave imperialista en la región.
La paz no le interesa al imperialismo, su objetivo es solo aniquilar a los países que mantienen cierta independencia.
Embargo al envío de municiones
Lo que demuestra plenamente la posición real de Lula en este conflicto fue su embargo sobre el envío de municiones a Ucrania. Sin aspavientos, esta sola medida tuvo repercusiones internacionales, además de contribuir a la diplomacia nacional.
En esta acción se lesionaron los intereses del imperialismo norteamericano. Incluso hay manifestaciones de otros sectores a favor de esta posición.
“La paz estuvo en el centro de nuestras discusiones en París durante la histórica visita del presidente Zelensky al canciller Scholz. Ucrania ha mostrado un valor real al abrir esta conversación con su plan de paz de 10 puntos. Sigamos juntos sobre esta base @LulaOficial” Emmanuel Macron (@EmmanuelMacron) 11 de febrero de 2023.
Esto generó dificultades logísticas para el imperialismo en la guerra en curso, imponiendo conflictos de contingencia o la necesidad de inversiones multimillonarias. Además de señalar una salida independiente a la situación.
Soberana y nacionalista
Si tuviéramos que analizar objetivamente la política de Lula, estaríamos seguros de tres características del gobierno: practica concesiones, busca la soberanía y tiene una posición nacionalista. Estas características estuvieron presentes de una forma u otra en todos los gobiernos del PT.
Este tercer gobierno de Lula es el más de izquierda entre los gobiernos del PT. Esta radicalización está impulsada tanto por las condiciones de vida de la población como por la poca predisposición del imperialismo a la conciliación.
Confusión de la izquierda
Como se mencionó anteriormente, un sector de la izquierda se sumó al ataque imperialista contra Lula, siendo el flanco izquierdo de este ataque. El imperialismo, incómodo con la posición de Lula, reaccionó de inmediato, iniciando una campaña a gran escala.
En esta campaña está la derecha tradicional y algunos sectores de izquierda como Andrew Korybko, un ideólogo norteamericano radicado en Rusia. Korybko se aferra a aspectos puramente formales de la diplomacia del gobierno de Lula, para lanzar una serie de ataques contra el gobierno de Lula, pero no considera sus resultados objetivos.
En general, la izquierda ha renunciado a la lucha de clases como criterio de análisis político y se guía solamente por las apariencias, dejando de lado los hechos objetivos. El resultado de esta ideología es una política contrarrevolucionaria, incompatible con el desarrollo político de los trabajadores.
No faltan ejemplos de ideologías totalmente ajenas al movimiento obrero en organizaciones de izquierda que acaban beneficiando solo a la derecha.
Ideólogo estadounidense con sede en Rusia
Korybko es un analista político estadounidense, más conocido por el libro «Guerras híbridas: de las revoluciones de color a los golpes». En general, expresa ideológicamente un sector de la burocracia rusa.
Para Korybko: “Así como ese movimiento estadounidense montó teorías de conspiración para encubrir cada vez que iba en contra de las expectativas políticas de su base para que no se rebelaran contra él, ese movimiento brasileño también está haciendo lo mismo para encubrir que Lula decepcionó su base multipolar de izquierda (condenando a Rusia) para que tampoco se rebele contra él.”
Su posicion es vacía y pone absurdos como “los liberales de Lula son básicamente una imitación brasileña de QAnon, pero para gente de izquierda en lugar de gente de derecha como los partidarios de Trump”. Colocando la candidatura de Lula al mismo nivel que la extrema derecha estadounidense.
Por ejemplo, este extracto de la declaración conjunta es duramente criticado por Korybko: «deploraron la violación de Rusia de la integridad territorial de Ucrania y la anexión de partes de su territorio como violaciones flagrantes del derecho internacional y pidieron una paz justa y duradera».
Sin embargo, la posición de Lula es anterior a su gobierno, no hay nada nuevo en ella, aún conserva una tradición diplomática nacional. Aunque su prohibición del envío de municiones se considera imparcial, en la práctica era completamente prorruso.
La política de Korybko no solo no aclara la situación en Ucrania, sino que termina por confundir las relaciones entre Brasil y Rusia. Esta posición sólo sirve al imperialismo del país de origen de Korybko, EE. UU., y perjudica a los países asediados por el imperialismo.
* La opinión de los columnistas no refleja necesariamente la opinión de este diario
