CENSURA
“Cancelación” llega a la feria del libro de Barcelona

Cualquiera que sea la razón de la censura, la censura en sí ya es algo que contradice la tradición de izquierda de libertad de pensamiento.

La editorial “El viejo topo” fue excluida de la feria internacional del libro de Barcelona.

Según la organización del evento, uno de los autores de la editorial no se ajustaba a los requisitos ideológicos del evento, el “antifascismo”.

A pesar de no señalar con el dedo a nadie, lo cierto es que el autor censurado fue el italiano Diego Fusaro, un autor de derecha y político italiano que ha militado en varios partidos.

Cualquiera que sea el motivo de la censura, la censura en sí misma es algo que contradice la tradición de la izquierda y la lucha de los oprimidos en su conjunto. Este es un festival que siempre se ha destacado por su amplio espectro de posiciones políticas e ideológicas, lo que lo hace parecer cuando menos extraño.

Las posiciones políticas de Diego Fusaro van en contra del status quo establecido por la izquierda mundial, que sigue estrictamente los dictados del imperialismo. Apoyo a Rusia, problema de la COVID-19, pautas de identidad, etc.: este es el verdadero motivo de su “cancelación” de la Feria de Barcelona.

El editor de la editorial “El viejo topo” publicó una nota en la que afirma que la actitud de la dirección de la Feria del Libro de Barcelona:

“Actuó como los inquisidores de la Iglesia católica en la Edad Media, prohibiendo y quemando los libros y sus actores en la hoguera simplemente por seguir la cartilla.”

El discurso único se está apoderando de todos los sectores de la izquierda mundial, parece el régimen nazi con la señal equivocada. Quieren impedir que las personas tengan acceso a cierto tipo de información o realidad, como si esto fuera impedir que el curso de la historia avance.

El efecto de esto en la situación concreta es lo contrario de lo que esperan sus defensores, el fascismo no está siendo controlado ni aplastado, está creciendo.

A medida que la situación económica empeora, tiende a llevar parte de la población al polo de la derecha, la izquierda debe mirar al pasado reciente y recordar lo que pasó cuando intentó usar el Estado y sus leyes para silenciar a la derecha.

No funcionó antes y no funcionará ahora ni en el futuro.

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