POLÍTICA INTERNACIONAL
La campaña «Hands off Venezuela» cobra impulso en EE.UU

El canciller venezolano Yván Gil expresó su apoyo a la protesta, destacando la contradicción de la política exterior estadounidense en su propio país

Como parte de una semana de más de 100 acciones coordinadas, los manifestantes se reunieron frente a la Casa Blanca en Boston, entre otros lugares, para denunciar las acciones agresivas del imperialismo estadounidense.

Grupos de derechos humanos de Estados Unidos realizaron el sábado 15 de noviembre una manifestación frente a la Casa Blanca, sede del gobierno norteamericano, con la consigna Hands off Venezuela, exigiendo el cese de las amenazas de invasión y ocupación, así como de las operaciones ilegales contra el gobierno venezolano. Los activistas denunciaron que las agresiones norteamericanas violan la soberanía nacional, al pretender apoderarse de los recursos naturales, a pesar de que la población estadounidense enfrenta una creciente crisis interna.

El canciller venezolano, Yván Gil, expresó su apoyo a la protesta, destacando la contradicción de la política exterior estadounidense en su propio país.

«El propio pueblo norteamericano está denunciando la maquinaria de guerra del Gobierno de EEUU, que desvía fondos que deberían ir a programas sociales para su propia población para financiar el envío de tropas y buques de guerra al Caribe», denunció el canciller venezolano en su canal de la red social Telegram.

Asimismo, señaló que la injerencia extranjera estadounidense no sólo atenta contra la soberanía nacional, sino que prioriza la militarización en lugar de atender los problemas sociales esenciales del país.

«En nombre del presidente Nicolás Maduro, saludamos esta valiente manifestación frente a la Casa Blanca, exigiendo el cese del intervencionismo y de las guerras contra otros países», dijo el diplomático.

En una marcha en el centro de Boston, los manifestantes criticaron la agresión estadounidense en el Caribe y denunciaron la política bipartidista de Estados Unidos contra Venezuela, que desde la presidencia de Hugo Chávez ha desafiado constantemente al imperialismo estadounidense, negándose a entregar recursos naturales, como el petróleo, al capital internacional.

Brian Garvey, de la organización Massachusetts Peace Action, comentó:

«La afirmación de que el gobierno de Maduro está traficando con drogas es un pretexto demasiado obvio que Estados Unidos está utilizando para promover un cambio de régimen, que permitirá a los inversores extranjeros saquear los recursos de Venezuela.»

El gobierno venezolano utiliza los ingresos procedentes de los recursos petroleros para apoyar la construcción de viviendas asequibles y proporcionar atención médica y educación gratuitas a la población, al tiempo que promueve la solidaridad internacional.

La campaña internacional Manos Fuera de Venezuela comenzó con las protestas celebradas los días 22, 23 y 24 de febrero de 2019, como forma de respuesta a la injerencia extranjera en Venezuela en ese momento, llevada a cabo por la organización proimperialista Venezuela Aid Live.

El 22 de febrero de 2019 se realizó un concierto musical supuestamente realizado como forma de ayuda humanitaria denominado Música por Venezuela: Ayuda y Libertad. Inicialmente se iba a realizar en el Puente Internacional Simón Bolívar, pero debido a las presiones del momento, se trasladó al Puente Internacional Tienditas en la ciudad de Cúcuta, Colombia, región fronteriza con Venezuela, como forma de presión internacional.

Este concierto fue utilizado como una forma de impulsar el gobierno ilegítimo de Juan Guaidó, realizado bajo el mismo modelo del Concierto de Bangladesh y Live Aid, organizado por Richard Branson, dueño de más de 360 empresas que conforman el Grupo Virgin, con el supuesto envío de ayuda humanitaria a Venezuela.

PORTUGUÉS: 04/12/2025