EUROPA
Alemania «predice» una guerra con Rusia en 2029
Documento publicado por el New York Times, considerado un plan secreto, pone de relieve los preparativos para una guerra en Europa del Este

El New York Times ha revelado la existencia del Plan Operativo Alemania (OPLAN DEU), de 1.200 páginas, elaborado durante dos años y medio por 12 oficiales superiores del Ejército alemán.
El proceso de redacción tuvo lugar en reuniones celebradas en un complejo militar de la capital, Berlín. El documento destaca los cambios estratégicos necesarios en las esferas civil y militar para preparar a la sociedad alemana ante la posibilidad de una guerra contra Rusia en los próximos años.
El OPLAN DEU se encuentra ahora en su segunda versión. La primera fue completada por el teniente general André Bodemann, veterano de las invasiones de Kosovo y Afganistán, en marzo de 2024. Desde entonces, el plan se ha presentado a los círculos ministeriales, organismos gubernamentales y autoridades locales.
El Plan Operativo proyecta la posibilidad de un conflicto ya en 2029, pues destaca que los rusos tendrían la capacidad y la voluntad de atacar a un miembro de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en la región de Europa del Este. Al menos 800.000 soldados de la OTAN -incluidos contingentes alemanes y estadounidenses- se desplazarían por territorio alemán. Sin embargo, una serie de incidentes de espionaje, sabotaje e incursiones en el espacio aéreo europeo sugieren que el ataque podría producirse antes de lo previsto. Acusaciones que sirven para enmascarar el hecho de que es Rusia la que está siendo atacada por los países imperialistas y, por tanto, necesita defenderse.
El plan también sugiere una razón para mantener la guerra imperialista contra Rusia a través de Ucrania alegando que un alto el fuego, como el que propone Estados Unidos esta semana, también podría dar tiempo a los rusos para perfeccionar sus capacidades militares.
Uno de los principales aspectos de la planificación es la integración de los aspectos civiles y militares en la preparación de la agresión. Se dice que las infraestructuras del país son inadecuadas para tiempos de guerra, lo que significa que se necesitan adaptaciones e inversiones del orden de 116.000 millones de euros para hacer frente a las limitadas dimensiones de puertos, aeropuertos, ferrocarriles y carreteras en relación con los equipos militares. El aspecto doctrinal del Plan es heredero del periodo de la Guerra Fría (1945-1991), pero con actualizaciones a la situación de la sociedad. Se enumeran los problemas del envejecimiento de la población, los trámites de la burocracia estatal y los problemas relativos al personal para la movilización.
Los puertos alemanes del Mar del Norte y del Báltico, por ejemplo, requieren una inversión de 15.000 millones de euros para adaptarlos a la situación de guerra. Esto incluye la suma de 3.000 millones de euros para adaptaciones de doble uso de las dársenas portuarias.
El Plan Operativo alemán también aborda cómo actuarían las instituciones estatales en estados de crisis y defensa si los dirigentes de la OTAN declarasen un escenario de activación del Artículo 5.
A finales de septiembre tuvieron lugar los ejercicios militares «Red Storm Bravo», dirigidos por el Mando Militar Estatal de Hamburgo. Estos ejercicios incluyeron un simulacro de fuerzas de la OTAN y del ejército alemán desplazándose juntas hacia el este, en dirección a Rusia.
El Plan Operativo Alemania hace hincapié en el importante papel de las empresas privadas a la hora de aumentar las capacidades necesarias para mantener el esfuerzo bélico. La empresa Rheinmetall, por ejemplo, ya es competente en el suministro de infraestructuras para campamentos, alojamientos de soldados, aseos, duchas, cocinas de campaña e incluso gasolineras.
El sabotaje figura como una de las mayores amenazas, ya que se dirige contra ferrocarriles y carreteras y sería llevado a cabo por agentes de bajo nivel. El plan prevé el uso de drones para proteger las infraestructuras críticas. La empresa de drones Quantum Systems señaló a través de su portavoz que la legislación no permite que los drones vuelen sobre zonas densamente pobladas y que tienen que estar equipados con luces de señalización. Por lo tanto, también son necesarios cambios legislativos en preparación para la guerra.
Recientemente, la Unión Europea propuso un «muro de drones» para proteger a Europa de una supuesta amenaza rusa. La prensa ha informado de incidentes con drones en los que se han visto implicados Rusia y Polonia en los últimos meses. Los rusos han sido acusados de violar el espacio aéreo de su país vecino, aunque han negado las acusaciones.
El ministro de Defensa, Boris Pistorius, señaló en una entrevista al Frankfurter Allgemeine Zeitung que Rusia está produciendo y mejorando rápidamente su arsenal a pesar de la guerra en Ucrania. Pistorius planteó la hipótesis de que los rusos atacarían tarde o temprano a un miembro de la OTAN y que el objetivo sería un país del este, refiriéndose probablemente a Polonia.
El presidente de la agencia alemana de espionaje Foreign Intelligence Service, Martin Jäger, afirmó que el presidente Vladimir Putin está dispuesto a poner a prueba las fronteras de Europa y podría iniciar un enfrentamiento en cualquier momento. La Unión Europea, por su parte, afirma que Moscú podría intentar un ataque contra cualquiera de los Estados bálticos.
Las declaraciones y acciones de los gobiernos indican una rápida preparación para una guerra contra Rusia. Alemania será la principal línea del frente en este conflicto y de la noche a la mañana se ha convertido en el mayor ejército de Europa Central. Los planes de rearme anunciados a nivel europeo suponen cientos de miles de millones de euros.




